En Heraldo de Aragón realizan una entrevista a María Moreno Jaso, Gerente y cargo de máxima confianza de la Junta directiva de AIRBE donde toman interés del desarrollo empresarial de la Comarca Ribera Baja del Ebro en los últimos 20 años.
Su perfil
Maria Moreno Jaso sigue en la nueva junta directiva de Airbe encabezada por José Luis Latre (presidente), Armando Mateos (secretario general), Ángel Francisco Vicente vicepresidente) y Jorge Terreros (Tesorero).
¿Cuándo se constituye la Asociación de Industriales de la Ribera Baja del Ebro (Airbe) y cuáles son sus objetivos?
Se crea por la iniciativa de siete u ocho empresas en el año 2000 que ven el potencial de estar unidas para poder conseguir mejoras. Es una organización intersectorial, de ámbito local para la defensa, representación y fomento de los intereses de la pequeña y mediana empresa y el empresario autónomo. Con el tiempo ha ido aumentando el número de socios y de servicios.
¿Cuántos miembros tiene actualmente la organización?
Está formada por 110 empresas situadas desde La Cartuja hasta Gelsa. Hay una diversidad de tamaños y de actividad con un total de 2.144 trabajadores. Más del 50% son pequeñas empresas de hasta 10 trabajadores y a partir de ahí son más grandes, pero con un tamaño medio de unos 25 o 50 trabajadores. Lo que más predomina es el metal y el sector servicios. Donde tenemos más empresas es en Fuentes de Ebro.
«El empresario, cuando hay elecciones, aguanta la respiración»
Recientemente se ha renovado la Junta Directiva de la asociación, que fue ratificada en febrero, con José Luis Latre como presidente.¿Qué cambios ha habido y qué objetivos se ha marcado el nuevo equipo?
La razón de ser de la asociación es potenciar el desarrollo económico y social de la zona. Entendemos que desde nuestra posición como plataforma de empresas, todo lo relacionado con el impulso en general tiene que ver con la empresa. Te vas a quedar a vivir donde tengas el trabajo, y otra serie de servicios. La asociación trabaja para dar asesoría o servicios que no existen, adaptarlos al perfil del asociado o hacerlos más económicos. También estamos trabajando la responsabilidad social empresarial, donde creemos que somos una plataforma para poder sensibilizar a las empresas y autónomos. Hemos trabajado la seguridad vial, el concepto de empresa saludable, igualdad, riesgos psicosociales, biomecánica del puesto de trabajo...
¿Qué carencias tenían los polígonos de la zona cuando se constituyó la asociación hace casi 20 años? ¿Se han conseguido mejoras?
Entonces no había un desarrollo industrial en la zona como el de ahora, que tenemos empresas fuertes, sobre todo, en El Burgo de Ebro, que han ido viniendo con el paso de los años. Esta zona no estaba tan potenciada industrialmente como podía estar toda la de aguas arriba, la Ribera Alta. Con el paso de los años el panorama ha cambiado porque hay muchas más empresas y más asentamiento.
Antes de 2008 la bonanza llevó al entusiasmo de crear empresas e invertir, pero luego pasó una época que ha sido dura para todos, no solo para la empresa. Pero es verdad que la zona ha ido sobreviviendo empresarialmente, aunque han cerrado empresas.
¿Qué necesidades tienen las empresas de la zona, que en otras ocasiones han denunciado el déficit en telecomunicaciones e infraestructuras?
Seguimos teniendo deficiencias en las áreas industriales a nivel de telecomunicaciones. El año pasado se dijo que se iba a implantar la fibra óptica en todos los polígonos, pero de momento, no hemos sabido nada más. Oyes titulares que dicen que la empresa que no esté digitalizada corre el riesgo del fracaso, de estar fuera del mercado, pero cómo va a estar una empresa digitalizada si no tiene la base que es una buena conexión de internet. Fuentes y El Burgo de Ebro todavía estamos cerca de la capital, pero conforme nos alejamos esto se pone peor. Cada uno se ha buscado una solución como ha podido.
Cómo va a estar una empresa digitalizada si no tiene conexión a internet
¿Siguen sufriendo las plantas los microcortes de electricidad?
Sí. Hay empresas que, dependiendo de la actividad, esa variación (de microsegundos) les supone una pérdida económica muy importante. Las empresas tienen que pasar unos controles muy importantes en sus instalaciones y siguen teniendo estos problemas.
¿En qué otros aspectos tienen problemas las compañías de estos municipios?
Tenemos un déficit de mano de obra cualificada en determinados sectores o puestos de trabajo y deberían de emprenderse acciones para formar a los jóvenes y orientarlos a estos puestos. También en no cualificados. No hay una oferta formativa orientada a la realidad empresarial de la zona. La asociación tiene una bolsa de empleo en la que las empresas asociadas, cuando tienen una demanda de empleo se ponen en contacto con nosotros, publicamos las ofertas y les gestionamos el reclutamiento. Los perfiles son variados, dependiendo de la época. En la de recolección piden peones para el campo o manipulado. Siempre nos cuesta mucho cubrir técnicos de mantenimiento o todo lo que tiene que ver con la robótica e incluso comerciales.
¿En qué situación se encuentran ahora las empresas, superada la crisis pero con dos citas electorales y cuando las estadísticas empiezan a hablar de ralentización?
En estos años se ha notado mucho cuando ha habido elecciones. A la hora de contratar, de invertir... En general, el empresario cuando hay elecciones aguanta la respiración. Recuerdo un año que la política estaba un poco convulsa y la gente estaba muy asustada. Cuando yo hablaba con ellos todos resoplaban como diciendo ‘a ver qué pasa’. Aunque ahora ya están más curtidos.
Información: Descargate la entrevista en PDF en https://drive.google.com/file/d/10H8W0MHdf5ddzavBs5aSBQObFXnGvDh-/view?usp=sharing
Fuente: Heraldo de Aragón (B. Alquézar)